viernes, 28 de diciembre de 2007

Grandes mentiras (2): "No tengo tiempo para capacitarme"

Vamos por partes. Si por "tiempo" entendemos "tiempo ocioso, sin nada que hacer", es evidente que ningún directivo medianamente serio tendrá tiempo para capacitarse.

Si por el contrario nos referimos a "la capacidad de organizar la agenda de forma que quepan también actividades de capacitación", ahí sí que quienes dicen no tener tiempo mienten flagrantemente. Hacen un poco imaginativo intento de justificar porqué no dan lugar a la capacitación. Al menos podrían ser más sinceros y decir: "no me interesa capacitarme, o al menos no me interesa tanto como para organizar mi día de forma distinta".

Por un lado, el tiempo del directivo (EL recurso escaso del directivo por excelencia) es una función directa de su eficacia. ¿Tiene poco tiempo? Sea más eficaz. Delegue más. Trabaje mejor en equipo. En dos palabras: trabaje mejor.

Para tener más tiempo, hay que invertir tiempo, preparando un equipo en el que delegar, ayudando a la gente en su desarrollo, dándoles oportunidad de tomar decisiones.

El problema es que hay que aprender a hacerlo bien, y aquí viene la necesidad de la capacitación. Hay que aprender a delegar, aprender a trabajar en equipo, aprender a analizar situaciones y tomar decisiones. De hecho, los directivos escasos de tiempo deberían pensar: "como no tengo tiempo, necesito capacitarme".

1 comentario:

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Raúl,

Efectivamente, hay que saber organizarse de forma adecuada. Además uno de los males de la dirección es que se resisten a soltar cotas de su poder, pretender controlar todo, sin darse cuenta que se están buscando la ruina.

La delegación es necesaria, sin embargo, para poder delegar con cabeza tienes que tener un equipo de personas que te pueda respaldar y eso lleva su tiempo.

Feliz entrada en el 2008.

Saludos,

Juan Martínez